Informe de avance del programa al cumplirse 18 meses del inicio del programa

CONAF MUESTRA EXCELENTES LOGROS EN EL PROGRAMA DE CAMBIO CLIMÁTICO

Y a la vez, todavía se enfrentan complejos desafíos y urge apoyo para continuar.

El programa “Transferencia Educación y Reforestación para el Cambio Climático” liderado por la Oficina Provincial de CONAF ha logrado avances que lo posicionan como un proyecto pionero en la acción climática para territorios insulares. Financiado por el Gobierno Regional de Valparaíso, este programa ha contado con una inversión de más de 766 millones de pesos y es hoy la iniciativa estatal de mayor impacto en la isla en términos de mitigación y adaptación al cambio climático. No obstante, el programa enfrenta desafíos que requieren urgente colaboración para asegurar su éxito total.

Logros Clave: Hacia una Rapa Nui Resiliente

En un año y medio de ejecución, el programa ha dado pasos firmes en la reforestación, logrando una producción de 113,547 plantas nativas y adaptadas, lo que representa más del 90% de su meta inicial, todo un logro considerando las limitaciones que -paradójicamente- impuso la reapertura de la isla al turismo y los cambios sociales que esto significó en términos de mano de obra y expectativas de remuneraciones.
En un territorio frágil donde los efectos del cambio climático y la erosión son visibles y amenazan tanto la biodiversidad como el suelo, esta cifra marca un hito fundamental, ya que Rapa Nui podría contar con una cobertura vegetal proyectada en 160,000 plantas al término del programa, un 130% por encima de lo esperado inicialmente.
Además, el control de erosión ha avanzado con éxito, completando ya el primero de tres proyectos planificados. Este esfuerzo es crucial para proteger los suelos agrícolas y prevenir la desertificación que amenaza las actividades económicas y el suministro de alimentos locales. A nivel de reforestación, con más de 96,000 árboles plantados, se avanza decididamente hacia la meta de 100,000 plantas, que podrían ser ampliadas en los próximos meses si las condiciones climáticas lo permiten.

Tabla resumen con los logros y avances hasta julio de 2024.

Educación: El Pilar Estratégico por Consolidar

El componente educativo del programa tiene como objetivo instalar un cambio profundo en la conciencia y en las prácticas de la comunidad frente a la crisis climática. Hasta la fecha, se han realizado cinco mesas de conversación, y se proyectan trece eventos educativos para finales de este año, incluidos conversatorios, charlas y programas televisivos locales, fundamentales para involucrar a la población en la adaptación climática desde una perspectiva social y cultural.
“El programa no solo restaura el paisaje; también restaura nuestra conexión con él. Es una apuesta por el futuro de la isla, que involucra a sus habitantes en la construcción de un entorno resiliente, consciente y adaptado a los desafíos globales,” enfatiza el equipo técnico de CONAF Rapa Nui. Sin embargo, para avanzar en los lineamientos del componente de educación, es clave contar con la retroalimentación que dan las mesas sectoriales, donde la misma comunidad plantea sus inquietudes y propuestas.

Un Programa Bajo Presión: Retos Administrativos y Recursos Humanos

A pesar del éxito operativo del programa, su continuidad pende de un hilo. La transición institucional de CONAF hacia el Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas (SBAP) y el Servicio Nacional Forestal (SERNAFOR) ha generado una reducción significativa de personal clave. A fines de agosto, seis funcionarios dedicados a tareas de terreno y gabinete dejarán el equipo, lo cual implica una pérdida sustancial de recursos humanos que demandará un esfuerzo sobrehumano del equipo restante para desarrollar la ejecución eficiente de las actividades programadas.
Por otro lado, la reapertura de Rapa Nui al turismo en 2022 cambió radicalmente el contexto socioeconómico de la isla, afectando los objetivos originales del programa que contemplaban absorber mano de obra afectada por la pandemia. Este cambio estructural ha generado interrogantes en la administración del programa, pero CONAF subraya que “en ningún momento se han interrumpido las actividades del proyecto ni se han utilizado los recursos en fines ajenos a su propósito.” En un escenario donde Rapa Nui se enfrenta a desafíos ecológicos únicos, como la erosión severa y la exposición a fenómenos climáticos extremos, esta acción programática es vista por muchos como una esperanza tangible para asegurar el futuro sostenible de la isla. Así se ha ido constatando con cada una de las mesas sectoriales realizadas, donde el programa ha ido llenando un notorio vacío en preocupaciones y expectativas de la comunidad que no estaban siendo atendidas ni canalizadas.

Más que un programa: un punto de inflexión

Rapa Nui, reconocida mundialmente por su patrimonio arqueológico y cultural, puede transformarse también en un referente de acción climática efectiva para territorios insulares. El programa no solo contribuye a mitigar los efectos del cambio climático, sino que también abre la puerta a la construcción de un plan de adaptación robusto para 2025, con la colaboración y participación de la comunidad. Todos los informes finales de las mesas sectoriales son difundidos de forma transparente a través de este sitio web y se entregarán formalmente a las autoridades después del término de las mesas y conversatorios, para que todos estos cuantiosos aportes sean insumos fundamentales para construir el plan local de adaptación al cambio climático, una deuda aun pendiente con este territorio.
Este proyecto no es simplemente una respuesta ecológica práctica, es un punto de inflexión, un referente, en el proceso de enfrentar los impactos del cambio climático en territorios con desafíos tan particulares como son las islas, y con mayor razón si se trata de una de las islas habitadas más remotas del mundo.

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