- Introducción
- 1. Primer Conversatorio: Turismo Regenerativo
- 2. Segundo Conversatorio: Incendios Forestales
- 3. Tercer Conversatorio: Recursos Hídricos
- 4. Síntesis de Temas Transversales y Conclusiones Generales
- La Fragilidad Insular y el Cambio Climático como Contexto Crítico:
- La Adaptación como Estrategia Central:
- La Educación y la Concientización como Pilar Fundamental:
- Necesidad de Gobernanza Robusta e Integrada:
- Valorización del Conocimiento Tradicional Rapa Nui:
- Participación Activa de la Comunidad y Responsabilidad Colectiva:
- Urgencia de Pasar a la Acción Basada en Datos y Planificación:
- Ordenamiento Territorial y Capacidad de Carga:
- Interconexión de los Desafíos y Soluciones:
- Conclusiones Finales
Introducción
El presente informe sintetiza los resultados y conclusiones de los tres conversatorios organizados como parte del Programa «Transferencia Educación y Reforestación para el Cambio Climático en Rapa Nui», ejecutado por CONAF. Este programa, iniciado en plena pandemia y con una duración inicial de casi dos años, busca transferir la experiencia de CONAF en educación y reforestación para abordar el cambio climático en la isla. La adaptación es vista como la respuesta inmediata y necesaria ante este fenómeno, especialmente crítico en Rapa Nui debido a su geografía aislada, suelos delgados y jóvenes, y condiciones climáticas como el viento, la sequía y las lluvias intensas.
Los conversatorios forman parte del componente «Te maramarama» («dar luz» o «iluminar») del programa y tienen como objetivo profundizar, co-construir estrategias y generar insumos para un plan de adaptación al cambio climático en Rapa Nui, incluyendo la elaboración de planes de acción comunal conforme a la Ley 21.455.
1. Primer Conversatorio: Turismo Regenerativo
Celebrado como continuación de una octava mesa sectorial enfocada en turismo y cambio climático, este conversatorio exploró el turismo regenerativo como una estrategia de adaptación climática. Los participantes diagnosticaron impactos del cambio climático en la actividad turística, incluyendo sequía, lluvias intensas, amplitud térmica, aumento del nivel del mar, marejadas, vientos fuertes e incendios forestales.
Las acciones de adaptación propuestas por la comunidad en la mesa sectorial previa incluyeron más reforestación, control de la huella turística, certificaciones medioambientales, potenciar la economía circular, más educación para residentes y visitantes, impulsar energías renovables, considerar un impuesto al turismo, diversificar la oferta, y aumentar la colaboración y planificación. El turismo regenerativo surgió como una visión ideal para la adaptación, buscando generar un impacto positivo y dejar las condiciones ambientales mejor de como se encontraron. Se destacó que Rapa Nui es pionera en abordar este concepto en la isla, incluso antes de su inclusión explícita en el Plan Sectorial de Adaptación al Cambio Climático a nivel nacional.
Se manifestaron diversas posiciones respecto al concepto de turismo regenerativo, que van desde totalmente favorable (viéndolo positivo «desde todos los lugares» y destacando ejemplos en Hawái y Nueva Zelanda) hasta desfavorable (calificándolo de «palabra de moda» que focaliza excesivamente en turismo y desconoce resultados previos). Otros fueron favorables con condiciones o de forma integradora, señalando la necesidad de educación, compromiso real, asociatividad, vínculos normativos, datos concretos y respeto por conceptos previos como el «turismo Rapa Nui». Esta evolución conceptual del turismo y el surgimiento de nuevas terminologías generó cierto escepticismo sobre si implican cambios sustanciales o solo actualizaciones de etiqueta.
Las reservas hacia el concepto se clasificaron en:
- Prácticas: relacionadas con la capacidad de implementación actual, como la baja proporción de alojamientos sustentables o la falta de mecanismos efectivos de compromiso y asociatividad.
- Conceptuales: cuestionamientos al término mismo como una «moda» o preferencia por conceptos integradores como «turismo Rapa Nui».
- Estratégicas: relacionadas con la priorización, creyendo que centrarse en turismo desvía la atención de problemas ecosistémicos más amplios o que debe ser parte de una estrategia más amplia.
Temas cruciales que emergieron incluyeron:
- Gobernanza y Coordinación Institucional: Se identificó la necesidad recurrente de una gobernanza efectiva y transversal que integre lo público y lo privado («somos como muchas islas trabajando entre medio»). Se propusieron instrumentos como Mesas Técnicas de Turismo y Educación.
- Educación y Concientización: Considerada un requisito previo fundamental a varios niveles (comunidad local, turistas, empresarios).
- Necesidad de Acciones Concretas: Hubo una preocupación general por pasar del «pensar a la acción», criticando la abundancia de conversatorios sin resultados tangibles.
- Producción Local y Soberanía Alimentaria: Vista como un componente importante, incluyendo propuestas como voluntariado turístico en parcelas o puntos de venta exclusivos para productos locales.
- Gestión del Agua como Prioridad: Emergió como un recurso crítico, priorizando su gestión incluso sobre acciones turísticas si no se conoce su disponibilidad real. Se sugirieron sistemas domésticos de recolección.
- Gestión de Residuos y Economía Circular: Abordada la problemática de los residuos, especialmente plásticos, con críticas a prácticas contradictorias y propuestas para transformar residuos en recuerdos turísticos o fomentar la economía circular.
- Identidad Cultural y Autenticidad: La cultura Rapa Nui fue destacada como eje del modelo turístico, con la necesidad de reincorporar prácticas tradicionales y autenticidad (tunuagi, pesca artesanal, uso de hojas de plátano).
Se identificaron tensiones como la controversia sobre el conocimiento de los resultados de la mesa sectorial previa, la tensión entre desarrollo económico y conservación, y la tensión entre la inmediatez de la acción y la planificación a largo plazo.
Incluyeron la importancia de la educación, la necesidad de gobernanza integrada, el reconocimiento de la fragilidad insular (vinculada a la capacidad de carga) y la participación activa del turista. Las divergencias se centraron en la pertinencia del concepto «turismo regenerativo», la secuencia de acciones, el rol del Estado versus la autogestión, la priorización de problemas (agua, residuos, biodiversidad) y la tensión entre inmediatez y planificación.
Mencionados incluyeron la Municipalidad, organizaciones indígenas (Maʼu Henua, Kati Pare, Honui), empresarios turísticos, funcionarios públicos (CONAF, SERNATUR, CONADI, SASIPA, Bienes Nacionales), parceleros/agricultores, académicos, consejeros regionales y particulares interesados. Se destacó el rol de Ma’u Henua en la definición de capacidad de carga y del municipio en normativas y regulación.
Que necesarias para la implementación incluyeron educación/concientización, gobernanza efectiva, datos e información de base, sustentabilidad básica previa y un marco normativo adecuado. Se esbozaron escenarios prospectivos (implementación gradual, planificación centralizada, acción inmediata diversificada, gobernanza integrada).
Señalaron la receptividad general pero cautelosa hacia el turismo regenerativo, la necesidad de contextualización al territorio, una visión más práctica que conceptual, la propuesta de integrar el concepto con el «turismo Rapa Nui», y el reconocimiento de su potencial transformador para abordar problemáticas ambientales y climáticas. La fragilidad del territorio y la riqueza cultural fueron identificados como ejes centrales. El desafío es lograr que las diferentes escalas de acción (individual, colectiva, institucional) se complementen.
2. Segundo Conversatorio: Incendios Forestales
Este conversatorio se dedicó monográficamente a la problemática de los incendios forestales (IIFF), tema identificado como prioritario en las mesas sectoriales 1 y 7 del programa. Los IIFF son una severa amenaza exacerbada por el cambio climático para el patrimonio natural y arqueológico, la seguridad alimentaria y los recursos hídricos de la comunidad. Se destacó la crítica situación de la isla con disminución de precipitaciones y aumento de temperaturas, lo que agrava la inflamabilidad, sumado a suelos degradados y incendios intencionales. Se concluyó que cambio climático e incendios forestales forman un círculo vicioso. La erradicación de los IIFF de origen intencional es crucial para una adaptación efectiva.
Los objetivos fueron priorizar siete lineamientos estratégicos surgidos de las mesas sectoriales y proponer acciones específicas para su implementación. Los siete lineamientos fueron:
- Educación ambiental integral.
- Colaboración interinstitucional.
- Políticas efectivas.
- Tecnología y prácticas sostenibles.
- Rescate de prácticas culturales.
- Monitoreo y evaluación.
- Participación comunitaria.
Priorización ponderada: realizada por los grupos de trabajo dio el siguiente orden:
- Educación Ambiental Integral (16.07%).
- Colaboración Interinstitucional (15.48%).
- Políticas Efectivas (14.88%).
- Tecnología y Prácticas Sostenibles (14.29%).
- Rescate de Prácticas Culturales (13.69%).
- Monitoreo y Evaluación (13.10%).
- Participación Comunitaria (12.50%).
La menor prioridad relativa de la Participación Comunitaria se interpretó no como una subestimación de su importancia, sino como un reconocimiento a la alta disposición colaborativa ya existente en la comunidad, sugiriendo que otros ámbitos requieren un impulso inicial más enfocado.
Se propuso un extenso catálogo de acciones concretas para cada lineamiento. Algunas áreas clave de acción incluyeron:
- Educación: Cápsulas multilingües, inclusión curricular, campañas masivas, capacitación para ganaderos/agricultores, educación desde el hogar, planes sectoriales, uso de testimonios, enseñar técnicas alternativas al fuego, educación a través de la práctica (brigadas ecológicas escolares).
- Colaboración/Gobernanza: Crear una oficina local de SENAPRED con personal dedicado y capacidad de decisión, optimizar recursos, organizar a la comunidad formalmente, establecer comité interdisciplinario permanente, unificar protocolos de comunicación y acción, mesas de trabajo interinstitucionales, alinear planes de emergencia, empoderar encargados.
- Políticas/Normativas: Crear política pública local para erradicar incendios (prohibiciones, limitaciones, sanciones), llevar conclusiones de conversatorios a decisiones oficiales, ordenanza municipal, regulación de quemas, fiscalización, promover la denuncia ciudadana, aplicar sanciones (multas, penas de cárcel).
- Tecnología/Prácticas Sostenibles: Uso de drones térmicos, tecnologías para vigilancia, manejo de recursos, prácticas productivas sostenibles, cortafuegos.
- Rescate Prácticas Culturales: Revalorar conocimiento ancestral (agricultura, agua, construcción, organización), promover fuegos controlados (quemas prescritas) bajo supervisión técnica y cultural, crear cortafuegos tradicionales, incentivar el ‘umanga (trabajo comunitario) en quemas/manejo residuos.
- Monitoreo/Evaluación: Uso de tecnología (drones térmicos), base de datos intersectorial georreferenciada, educar a la comunidad para interpretar datos, encuestas de evaluación, difundir estadísticas, auditar sistemas, monitoreo en terreno, cuadro de mando integral, planificación conjunta para monitoreo y mantención de cortafuegos.
- Participación Comunitaria: Crear protocolos de apoyo diferenciados, involucrar sector turístico (plantaciones, campañas), crear/equipar cuadrillas de voluntarios capacitados, agenda anual de actividades, mejorar comunicación de espacios de participación, reuniones periódicas, fortalecer asociaciones comunitarias (incentivos), plan de ganadería comunitaria sostenible.
Aportes institucionales claves: Se presentaron aportes institucionales, y en particular.
- SENAPRED (Sistema Nacional para la Prevención, Mitigación y Atención a Desastres): Explicación del sistema de emergencias provincial y comunal (COGRID), liderazgo según tipo de emergencia, miembros permanentes, planes institucionales. Se hizo un llamado urgente a contar con funcionarios de SENAPRED en la isla, destacando que la ayuda continental tarda al menos 72 horas y la dependencia actual de la «buena voluntad» y proveedores privados para comunicaciones.
- Carabineros: Su vínculo histórico y legal con la protección forestal (Ley de Bosques de 1931), labor de prevención (campañas, charlas), investigación (buscar origen y responsables) y penas aplicables (dependen de la magnitud del daño y si hay dolo o negligencia). Se compartieron estadísticas locales, mostrando una disminución de casos de IIFF en 2024 respecto a 2023, aunque influenciada por factores climáticos (sequía). Se explicó el reporte «de oficio» cuando no hay denuncia formal y las posibles discrepancias con cifras de CONAF.
También se abordó el Impacto de los incendios en el patrimonio cultural arqueológico. Los incendios dañan los moai al romper enlaces químicos y físicos de la roca debido a la alta temperatura, acelerando la desintegración, efecto agravado por el hollín generado por la vegetación (ma’uku piro) que crece sobre ellos. Se identificaron «zonas rojas» de quemas recurrentes, afectando siempre a los mismos moai. Se enfatizó la urgencia de aplicar tratamientos de conservación (limpieza de hollín, consolidante con sílice, hidrorepelente, extracción de líquenes) para controlar la desintegración y evitar la pérdida de detalles en un porcentaje significativo de los moai (hasta un 20% en 10 años si no se hace nada). Esto, además, genera trabajo y conocimiento local, fortaleciendo la identidad cultural.
Las conclusiones clave del informe del 2do conversatorio reafirmaron que el conversatorio cumplió sus objetivos, consolidaron la educación ambiental como «piedra angular», destacaron la demanda urgente por fortalecer la gobernanza de riesgos (colaboración, liderazgo de SENAPRED, políticas efectivas), reconocieron la participación comunitaria como un activo valioso a estructurar, valoraron la exhaustividad de las acciones propuestas y la necesidad de un enfoque integrado, y reconocieron el vínculo entre erradicación de IIFF y adaptación climática. Se recomendaron el desarrollo de un plan de acción detallado, la movilización de recursos, el impulso al fortalecimiento de la gobernanza (SENAPRED), un mecanismo de seguimiento/evaluación, fomento de alianzas estratégicas, integración de conocimiento tradicional/científico, comunicación continua y continuidad de los espacios de diálogo.
3. Tercer Conversatorio: Recursos Hídricos
Este fue el tercer y último conversatorio del programa, centrado en la crucial gestión del agua en Rapa Nui. La isla enfrenta una crisis hídrica reconocida, con disminución de lluvias, sobreexplotación del acuífero, intrusión salina, impacto en ecosistemas, erosión del suelo, infraestructura vulnerable y alta demanda, especialmente por el turismo. La falta de planificación general y urbana, así como la ausencia de medidas de mitigación efectivas y soluciones futuras claras, justifican la urgencia.
El conversatorio tuvo como objetivos priorizar cinco lineamientos estratégicos identificados en la Mesa Sectorial Número 9 y proponer acciones específicas para cada uno. Los cinco lineamientos trabajados fueron:
- Ordenamiento territorial.
- Recuperación de prácticas ancestrales.
- Reforestación y restauración de ecosistemas.
- Manejo y uso eficiente del agua.
- Gestión del turismo.
La priorización realizada por los grupos de trabajo destacó dos lineamientos como prioridades urgentes:
- Ordenamiento Territorial (18.40%).
- Manejo y Uso Eficiente del Agua (17.33%). Estos resultados reflejaron la necesidad de un marco normativo coordinado y medidas para evitar la pérdida de agua y asegurar su uso responsable.
Acciones específicas
Se propusieron un total de 72 acciones específicas, posteriormente conceptualizadas en 16 temas. Ejemplos de acciones por lineamiento incluyen:
- Ordenamiento Territorial: Crear un plan integral único (fusiones), aumentar requisitos/regulaciones para patentes y permisos (condicionados al cuidado del agua), generar conversatorios para ordenanzas concretas, regular población animal, alinear instituciones públicas, organizar plan hídrico con reglamentación/indicadores, plan de educación cívica, declarar estado de estrés hídrico, resolver problemática del aumento de la isla (población/demanda) con el gobierno responsable, plan de recolección aguas grises público-privado.
- Manejo y Uso Eficiente del Agua: Cosecha de agua lluvia (domiciliaria, urbana, hotelera), reutilización de aguas grises (previa separación), planta desalinizadora, concientización sobre el estado del agua en la isla, implementar tecnologías eficientes adaptadas a Rapa Nui (sanidad, captación), unificar aportes estatales para captación/reutilización, generar acciones permanentes de estudios (cantidad de agua posible por hogar), monitoreo y «alertas» de uso.
- Gestión del Turismo: Condicionar patentes a la gestión eficiente del agua y residuos, educación ambiental/concientización para turistas sobre uso responsable del agua, fomentar/certificar prácticas sostenibles en hotelería, definir capacidad de carga, monitorear uso del agua por el sector, revisar normativa existente y crear nueva, implementar sistemas de temporización en hoteles.
- Reforestación y Restauración: Implementar, monitorear y hacer sustentable el plan de reforestación, reforestación estratégica (estudio de lugar/especies, optimizar recurso hídrico), educación/concientización en niños/jóvenes, crear paisajes de retención de agua (evitar escorrentía), reforestar con especies nativas (bosquetes cortafuegos), restaurar humedales (erradicar exóticas, introducir nativas), promover uso de Mahute y pastos nativos en tierras erosionadas, plan de acción de recuperación/protección de Rano Aroi, Raraku, Kau, plantar en toda la isla y hacer seguimientos, ordenar la ganadería, incluir a propietarios de bosques/humedales en estudios de responsabilidad ambiental.
- Recuperación Prácticas Ancestrales: Educación en colegios para reutilizar el agua, enseñar prácticas antiguas (poko poko para lavar platos, conexión de cañerías para reutilizar agua doméstica), recuperar y enseñar técnicas tradicionales de agricultura y gestión del suelo (manavai, pu’oka o jardines de roca, terrazas agrícolas, uso de Puna), generar estudios arqueológicos, aprender a generar suelos (compostaje), captación aguas lluvias en contenedores, considerar «Reservas Naturales» (Vaitea) como parques comunitarios, recuperar valores ancestrales (manavai, taheta, Tapu, Rahi).
Pilares identificados
Del análisis de las acciones emergieron tres pilares transversales fundamentales para una gestión hídrica integral y sostenible:
- Educación y Concientización: Incluye educación en prácticas ancestrales, educación ambiental para turistas y educación general sobre uso eficiente del agua.
- Reutilización de Recursos: Enfocado en reutilización de aguas grises y compostaje/generación de suelos.
- Sistemas de Captación y Monitoreo: Abarca captación de agua de lluvia a múltiples niveles y monitoreo/control del turismo en relación con los límites territoriales y el estado del recurso.
Estos pilares son vistos como fundamentales para estructurar una propuesta concreta de gestión hídrica a través del Ordenamiento Territorial.
Presentaciones clave incluyeron la de Tamaru Huke contextualizando el programa y los objetivos, y la de Nancy Rivera sobre el proyecto de Caracterización y Manejo del Acuífero de Rapa Nui, destacando la instalación de piezómetros para monitorear el acuífero y la calidad del agua, y su importancia para planificar la capacidad de carga humana y animal.
Conclusiones
Las conclusiones principales del informe del 3er conversatorio destacaron el consenso sobre la urgencia del Ordenamiento Territorial y el Manejo Eficiente del Agua, la amplitud de las soluciones propuestas, la utilidad de los tres pilares transversales como marco estratégico, el compromiso de la comunidad evidenciado en la participación activa, y el valor de las presentaciones técnicas. Se identificaron el turismo y el ordenamiento territorial como áreas con mayor necesidad de intervención, la educación como eje transformador, la demanda por un marco regulatorio robusto, la valoración del conocimiento ancestral, un enfoque integral y participativo, y la propuesta de soluciones prácticas y tecnológicas.
Los próximos pasos recomendados incluyen la difusión amplia de los resultados, su uso como insumo fundamental para el Plan de Acción Comunal de Cambio Climático (Ley 21.455) y otras políticas/proyectos, la continuidad del diálogo y la integración con otras iniciativas de planificación y gestión.
4. Síntesis de Temas Transversales y Conclusiones Generales

A partir del análisis de los tres conversatorios, emergen varios temas y hallazgos transversales:
La Fragilidad Insular y el Cambio Climático como Contexto Crítico:
Todos los conversatorios parten del reconocimiento de la extrema vulnerabilidad de Rapa Nui frente al cambio climático, agravada por su condición de isla aislada con ecosistemas frágiles y recursos limitados. Fenómenos como la sequía, el aumento de temperaturas, las lluvias intensas y los eventos extremos tienen impactos directos y complejos en áreas clave como el turismo, la incidencia y gravedad de los incendios forestales, y la disponibilidad de recursos hídricos.
La Adaptación como Estrategia Central:
La necesidad imperante de adaptarse a los efectos del cambio climático es un hilo conductor. Se reconoce que, si bien la mitigación es importante, la adaptación es la tarea principal y urgente para la sociedad rapanui, basándose en la capacidad de adaptación histórica demostrada por sus antepasados.
La Educación y la Concientización como Pilar Fundamental:
La educación ambiental integral y la sensibilización emergen como un requisito previo y un componente transversal esencial para cualquier estrategia exitosa de adaptación. Se percibe como el cimiento para construir una cultura de prevención, resiliencia y uso responsable de los recursos.
Necesidad de Gobernanza Robusta e Integrada:
Existe una demanda clara y recurrente por fortalecer la gobernanza de la isla en la gestión de riesgos y recursos, requiriendo una mayor coordinación y colaboración entre los múltiples actores públicos, privados, comunitarios y consuetudinarios. La falta de coordinación («somos como muchas islas») y la dependencia de la «buena voluntad» son identificadas como obstáculos. Se propone explícitamente la creación o fortalecimiento de una oficina local de SENAPRED para liderar la coordinación de emergencias.
Valorización del Conocimiento Tradicional Rapa Nui:
El rescate e integración del conocimiento ancestral rapanui es considerado fundamental no solo para la preservación cultural, sino también como fuente de soluciones prácticas y sostenibles para la adaptación, el manejo del territorio, el agua y la prevención de riesgos como incendios. Ma’u Henua juega un rol clave en este ámbito.
Participación Activa de la Comunidad y Responsabilidad Colectiva:
La participación de la comunidad es vista como esencial en todas las fases, desde el diagnóstico y la propuesta de soluciones hasta la implementación. Aunque la comunidad ya demuestra disposición a colaborar, se plantea la necesidad de estructurar y formalizar esta participación. Se subraya la responsabilidad compartida y el compromiso colectivo para enfrentar los desafíos.
Urgencia de Pasar a la Acción Basada en Datos y Planificación:
Existe un consenso sobre la necesidad de avanzar de la reflexión a la acción concreta y tangible. Sin embargo, se reconoce que esta acción debe estar basada en datos e información confiable, siendo la escasez de estadísticas un obstáculo significativo para la gobernanza y la planificación efectiva. Se debate la tensión entre la inmediatez requerida y la necesidad de una planificación integral a largo plazo.
Ordenamiento Territorial y Capacidad de Carga:
La importancia de un ordenamiento territorial integral y la definición de la capacidad de carga de la isla son temas centrales, especialmente en el contexto del turismo y la gestión del agua. Existe una demanda por marcos normativos y regulaciones claras que guíen el desarrollo.
Interconexión de los Desafíos y Soluciones:
Los conversatorios demostraron que los desafíos (cambio climático, turismo, incendios, agua) y sus soluciones están intrínsecamente ligados. Un enfoque holístico e integrado que articule educación, gobernanza, políticas, tecnología, cultura, monitoreo y participación es indispensable.
Conclusiones Finales
Los tres conversatorios del Programa CONAF han sido fundamentales para movilizar a diversos actores de la comunidad rapanui e instituciones en un diagnóstico participativo y la co-construcción de estrategias frente a los impactos del cambio climático. Se ha generado un consenso claro sobre la urgencia de actuar y la necesidad de un enfoque integral que considere la fragilidad del territorio y la riqueza cultural como ejes centrales.
Las principales prioridades identificadas son la Educación Ambiental Integral, el fortalecimiento de la Gobernanza y la Colaboración Interinstitucional (incluyendo la institucionalización de SENAPRED local), y la urgencia del Ordenamiento Territorial y el Manejo Eficiente del Agua. El rescate del conocimiento ancestral y la participación comunitaria son reconocidos como activos valiosos y componentes esenciales.
Existe una clara demanda por traducir las discusiones en acciones concretas y normativas efectivas, respaldadas por datos confiables y sistemas de monitoreo. Los resultados de estos conversatorios constituyen un insumo valioso y consensuado que servirá de base para la elaboración del futuro Plan de Acción Comunal de Cambio Climático de Rapa Nui y otras iniciativas de adaptación y gestión territorial. El éxito dependerá de la capacidad de los actores locales para construir puentes entre visiones, articular las diversas propuestas en un marco coherente y asegurar la continuidad y el financiamiento para la implementación.
Este informe ejecutivo busca proporcionar una visión consolidada de los principales temas, consensos y propuestas surgidas de estos importantes diálogos para la resiliencia de Rapa Nui.